El gobierno danés coincide con los Estados Unidos en que el 'statu quo' actual sobre Groenlandia "no puede seguir así", teniendo en cuenta el voltaje liberado de la guerra ucraniana, pero también es la opinión de que los términos del tratado de 1951 siguen concediendo el margen de maniobra suficiente para resolver la crisis diplomática abierta entre Washington y Copenhague. 

Groenlandia es un territorio danés autónomo y los objetivos repetidos para la administración de Trump, que ya ha jugado en su primer mandato con la idea de que varias administraciones anteriores ya se han considerado "comprar" la isla como medida de seguridad nacional. 

Todos estos problemas han aparecido cuando el vicepresidente estadounidense JD Vance visitó este viernes la isla de Groenladia, que ha llegado a asegurarse de que su país no tenga más remedio que "acordar el área del territorio cuando se independizó de Dinamarca usando un referéndum sobre la autodeterminación". 

Tras una primera respuesta de la primera ministra danesa, Mette Frederiksen; esta madrugada del sábado ha sido el turno del ministro de Exteriores, Lars Lokke Rasmussen, quien, al igual que la jefa del Gobierno ha lamentado "el tono" de las declaraciones de Vance.

EITB. (2025, marzo 29)