En la segunda ronda de las elecciones presidenciales ecuatorianas, Daniel Noboa ganó más de un millón de votos y alcanzó el 55.85%, en comparación con el 44.15% de su competidora Luisa González. 

A pesar de las quejas sobre el fraude de la candidata de la Revolución Ciudadana (RC), el Consejo Nacional Electoral (CNE) confirmó que la tendencia era irreversible con el 93% de los votos escrutados. Noboa enfatizó que su victoria fue el resultado de "perseverancia, lucha y trabajo", diciendo que no había fraude, afirmando que las diferencias en la votación hacían imposible tal acusación. También anticipó cambios en su gabinete y la continuidad de su mandato en mayo. 

El día de las elecciones se caracterizó por un alto nivel de participación del 83% y un clima de tensión debido a las acusaciones de irregularidades por parte de la RC, que denunciaba fraudes y exigía un recuento. Los simpatizantes de González protestaron en las calles y exigieron transparencia. 

Las elecciones, que se celebraron bajo un estricto estado de excepción y fuertes medidas de seguridad debido a la violencia en el país, se produjeron tras un periodo de incertidumbre política.

La Jornada. (2025, abril 14)