Fuertes lluvias azotaron al sur de Florida durante toda la semana, provocando inundaciones, tornados, cierres de autopistas, cierres de escuelas y casi 300 cancelaciones de vuelos, especialmente en el aeropuerto de Fort Lauderdale, pero sin heridos hasta el momento.

 Las precipitaciones ya han alcanzado los 1,2 metros (4 pies) en algunas zonas, y junto con la posibilidad de que se forme una depresión tropical en el oeste del Golfo de México la próxima semana, de ocurrir, afectará a Texas y otras zonas, según el pronóstico meteorológico. 

 Las lluvias afectaron principalmente a los condados de Miami-Dade y Broward en el sureste de Florida, pero afectaron principalmente a Alligator Alley y la Interestatal 75, que corre de este a oeste a través de los humedales de los Everglades.

 Varias universidades de estas regiones han anunciado su cierre. Las televisiones locales de ambas zonas afectadas mostraron escenas de coches atrapados en el agua, viajeros frustrados en los aeropuertos y árboles caídos, incluso en las calles del centro turístico de Miami Beach.

 EFE. (2024, junio 13)